En Cataluña, el pan con tomate se aplica a todo tipo de panes (tradicionales o industriales) y acompaña los embutidos; el pan con tomate es, sobre todo, recomendable con rebanadas anchas y delgadas de hogazas de pan. Antes era una manera de reblandecer el pan duro, ahora el pan se prepara así porque resulta más apetitoso.
Ingredientes
1 pan (una barra de pan, una hogaza), 1 tomate maduro (o más según su tamaño y jugo), sal y aceite de oliva.
Preparación
- Se corta el pan a rebanadas.
- Se parte un tomate por la mitad (por el diámetro más ancho).
- Cogemos una de las mitades y la frotamos por una cara del pan. Cuando esa cara esté de un color rosa intenso, giramos la rebanada y frotamos el tomate por la otra cara del pan. Cuando una mitad de tomate se queda sin pulpa, se toma otra.
- Finalmente salamos el pan y lo rociamos con un buen chorro de aceite (también por las dos cara). El pan con tomate debe prepararse y comerse a continuación; con el tiempo, los ácidos del tomate se oxidan y dan mal sabor al pan.