¿Cómo se forman los nombres en México?

Los mexicanos tienen varios nombres y dos apellidos; sin embargo, para entender el funcionamiento y las formas de nombres y apellidos, es necesario tener en cuenta diversas cuestiones:

En cuanto llegaron a América, los misioneros españoles se dedicaron a bautizar a los antiguos mexicanos y a darles nombres y apellidos españoles, porque así lo mandaba la religión católica. Un ejemplo famoso es el de la Malitzi (Malinche), que terminó siendo doña Marina de Cortez.

El bautismo no llegó por igual a todo el país, y todavía se conservan apellidos y nombres mexicanos. Sin embargo, la forma de ordenar y estructurar los apellidos es básicamente la española, es decir: cada persona tiene dos apellidos, y el primero de ellos es el primer apellido del padre, y el segundo el primer apellido de la madre. El apellido del padre se considera siempre el más importante.

Además los mexicanos saben, con solo ver escrito el nombre de alguien, si sus apellidos proceden de antepasados españoles o del bautismo de los misioneros en la época colonial. Básicamente se siguen estos criterios:

  • Apellidos poco usuales, es decir, los que no pertenecen en la lista de apellidos comunes, como Villarreal o Villarroel.
  • Apellidos compuestos que se unen por la preposición de: Alvarado de Galicia, Gonzaga de Ibarra o Arnábar de Díez.
  • La preferencia por algunos nombres de pila concretos (como Julián).